|
|
|
Martes 4 de marzo de 2025
|
|
|
|
| Recibes esta carta cada martes porque tienes una suscripción a ABC Premium. Si no quieres que te la enviemos puedes darte de baja al final del email. | | |
|
La dimisión de un Pontífice está contemplada en el Código de Derecho Canónico pero el entorno de Francisco no quiere ni oir hablar de esa posibilidad
|
|
Es la palabra que nadie se atreve a pronunciar en el Vaticano. A la vez, es el resorte que hace saltar con ímpetu, para negarla, a los vaticanistas del sector más francisquista que viven instalados en la periferia de la papolatría. | | Ni hablar de la renuncia del Papa. Ese parece el nuevo dogma instalado en el entorno de Francisco, aunque cuanto más avanzan los días de su enfermedad -y sin una mejora clara en su estado de salud- las probabilidades de que siga los pasos de Benedicto XVI van en aumento. Francisco confesó en 2022, en la entrevista concedida a ABC, que tenía firmada su carta de renuncia «en caso de impedimento por cuestiones médicas». Pero también ha explicado en varias ocasiones que dimitir no estaba en su agenda y que no tenía intención de dejar la Sede de Pedro porque la renuncia de los Papas «no debe convertirse en algo así como una moda, en algo normal». | | Pero, por otro lado, esta semana superará los 20 días de hospitalización de Juan Pablo II tras el atentado y, aunque está lejos de los 55 que llegó a estar poco después en el Gemelli tras la infección viral contraída por las transfusiones de sangre, la situación de Francisco, con 88 años, en silla de ruedas y con problemas de obesidad, es bien distinta a la de aquel Wojtyla atlético de 61 años. Lo que preocupa no es sólo su estado de salud, sino la larga convalecencia que le espera si consigue superar la neumonía que lo mantiene con «pronóstico reservado» desde que entró en el hospital. | | De hecho, en el actual estado de salud y mientras esté hospitalizado, la renuncia queda prácticamente descartada. En su ausencia, el trabajo en la Curia no se paraliza y, en el Vaticano, para las decisiones ordinarias se gobierna en modo ‘ad mentem Papam’, es decir, tomando las decisiones que él habría tomado. Las decisiones de mayor relevancia se reservan para las visitas del Secretario de Estado, como la del pasado fin de semana, o, simplemente, se aplazan. | | El problema podría llegar en el previsible caso de que salga del hospital en un estado de salud muy débil que le obligue a una larga convalecencia, que además le impida participar en actos públicos y presidir las celebraciones propias del Pontífice. Una reclusión en Santa Marta, por motivos de salud, implicaría también que el acceso a Francisco quedara restringido a un reducido grupo de colaboradores. | | Como recordaba este domingo en ABC Javier Martínez-Brocal, uno de los motivos que llevaron a Benedicto XVI -según dejó escrito su entonces secretario Georg Gänswein en su libro 'Nada más que la verdad' (2023)- fue «evitar que alguno de sus colaboradores ganara espacios de poder» que no le corresponden. En los últimos años del pontificado de Juan Pablo II, el cardenal «Ratzinger había visto cómo los principales exponentes vaticanos habían ido ganando cada vez más influencia, a veces incluso compitiendo entre sí», añadía. | | Pudiera ser que, en esa situación, Francisco -que en este pontificado ha instaurado la política de cambiar cada cierto tiempo de secretarios personales para evitar que adquieran más poder del que les corresponde- se planteara la opción de la renuncia, una posibilidad contemplada en el Código de Derecho Canónico y para la que ya cuenta con el cercano precedente de Benedicto XVI. Según el canon 332 §2, «si el Romano Pontífice renunciase a su oficio, se requiere para la validez que la renuncia sea libre y se manifieste formalmente, pero no que sea aceptada por nadie». | | Cobraría entonces sentido el consistorio para tratar las próximas canonizaciones que Francisco convocó, sin fecha concreta, la semana pasada, por más que desde el entorno del sustituto de la Secretaría de Estado se aprestaran a sentenciar que la convocatoria «no es para otra cosa». Recordemos que fue en un acto similar en el que, por sorpresa, Benedicto XVI presentó su renuncia, remarcando en su anuncio que la decisión la había tomado en conciencia y de forma libre. No se le puede negar esa posibilidad a Francisco. Ni convertir a Edgar Peña Parra en intérprete de las intenciones últimas del Papa, porque eso supondría consagrar ese temor de los colaboradores que buscan ganar espacios de poder que trató de evitar Ratzinger con su renuncia. | | | |
|
Llevado y sostenido por todo el pueblo de Dios
|
|
| | | Director Editorial en Cope | | Concédenos padecer en nuestro cuerpo lo que faltó en tu Cruz», canta un antiguo himno de la tradición cristiana. Este domingo el Papa Francisco hacía llegar su mensaje para el rezo del Ángelus desde su habitación en el Policlínico Gemelli, y se refería a la «bendición» que se esconde dentro de la fragilidad, porque esta condición nos permite aprender aún más a confiar en el Señor, y daba las gracias a Dios «porque me da la oportunidad de compartir en el cuerpo y en el espíritu la condición de tantos enfermos y personas que sufren». | | | |
|
|
Karol Wojtyła (futuro Papa Juan Pablo II) durante una excursión por lo montes Tatra. En la imagen, mochila al hombro como un excursionista más en 1955 //
ABC
|
|
|
|
|
Manuel P. Villatoro
|
|
|
En 1945, Karol Wojtyla, entonces un seminarista polaco de 25 años, escapó de los soldados nazis y soviéticos
|
|
|
Sin foto de Francisco en el hospital
|
|
No vamos a tener imágenes. Al menos, de momento. La Oficina de Prensa de la Santa Sede explicaba ayer que «hay que respetar los deseos del paciente» y que «habrá fotos en el momento oportuno». Hace unos días, en la rueda de prensa en el Gemelli, el doctor Sergio Alfieri devolvía la pregunta a los periodistas sobre esta ausencia de imágenes: «¿Quieren ver una foto del Papa en pijama? Respetemos la privacidad de todos». Y aseguró que «cuando él quiera hacerse ver, se hará ver y vestido de Papa». | | Es evidente que es un deseo directo de Francisco el que no se publique ninguna imagen de su hospitalización, pero la ausencia de esa foto, como la falta de transparencia de los primeros días, sólo da pie a rumores, malas interpretaciones e incluso teorías de la conspiración. Hemos visto a Francisco en otras hospitalizaciones en el Gemelli, aunque es cierto que, como decía Alfieri, vestido de Papa. Pero a nadie le escandalizaría la imagen de un Pontífice postrado, en medio del dolor, en la cama del hospital. Vimos a Juan Pablo II con el pijama hospitalario, con las vías y los vendajes, unos días después de su atentado, y la imagen, más que alarmar, sirvió para tranquilizar a quienes quedamos impactados por aquellos disparos en la plaza de San Pedro. Ahora, la ausencia de una foto similar sólo sirve para alimentar las teorías de que el estado de Francisco es mucho peor del que se cuenta. | | | |
|
| El Greco. Santo Domingo el Antiguo | | Hasta el próximo 15 de junio, en la Galería Central del edificio Villanueva del Museo del Prado se reúnen, por primera vez desde su dispersión, ocho de las nueve obras que el Greco realizó para la iglesia del Monasterio de Santo Domingo el Antiguo de Toledo. | | La Asunción, la gran tela central del retablo mayor, que desde 1906 forma parte de las colecciones del Art Institute de Chicago, se expone junto a las dos obras de este retablo conservadas en la colección del Museo del Prado, a las que permanecen en Santo Domingo el Antiguo y a las que se encuentran en otras colecciones. | | | Un detalle del retablo de Greco que ahora muestra el Museo del Prado ABC // | | | |
|
|
Esperamos que hayas disfrutado de la lectura
¡Hasta pronto!
|
|
|
|
Has recibido esta newsletter editorial como usuario de
ABC.ES. Si deseas dejar de recibir esta newsletter en tu cuenta de correo electrónico
, puedes darte de baja utilizando el siguiente enlace:
Baja.
|
Además, puedes modificar en cualquier momento tus preferencias en cuanto a la recepción de newsletters a través de la sección correspondiente de tu área de usuario, a la que puedes acceder desde
aquí.
|
Recuerda también que puedes activar o desactivar el envío de otro tipo de comunicaciones a través del
área de usuario.
|
En caso de querer ejercer tus derechos de acceso, rectificación, supresión, oposición, limitación y portabilidad, puedes hacerlo remitiendo un correo electrónico a la siguiente dirección
protecciondedatos@abc.es. Para más información sobre el tratamiento de tus datos personales, consulta la
Política de Privacidad.
|
|
|
|
|
|