Betis y Sevilla cierran el primer tercio de curso dentro de sus aspiraciones, aunque ambos piensan que pueden dar incluso un pasito más

A muchos profesionales del fútbol les molestan los exámenes parciales, citando siempre al mes de junio para ver la nota con perspectiva después de un curso largo y posiblemente sufrido. La prensa no opinamos igual porque los dientes de sierra, si es que los hay, también son analizables, así cómo la recuperación o caída de un equipo en su trayecto anual. En cuanto a los equipos sevillanos, ninguno puede o debe quejarse realmente. El Betis vive instalado en una sensación de plena felicidad, aunque en días señalados no termine de dar el salto definitivo. Con los deberes bien encaminados en Europa, en la Liga está instalado en la quinta plaza de forma cómoda. Sin agobios. Cierto es que quiere dar el salto a la cuarta plaza por si la ubicación actual termina no dando Champions, pero es que el ritmo de los clubes que van por delante es infernal. Con 20 puntos, la media Pellegrini va rodada.

Da la sensación que incluso más que en años anteriores, donde siempre costaba arrancar o existía un punto del camino donde las piedras no permitían progresar. Con Antony y Cucho de modo estelar, siempre a la espera de recuperar a Isco, el Betis se afianza como el quinto de España a la espera del despiste del Villarreal, el único que parece que puede ceder puntos por ser el menos histórico, no por nada que delate su juego.

En el Sevilla hemos vivido ya de todo. De la cima a la sima. De esas dos victorias consecutivas que no se conseguían hacía año y medio, a vivir tres derrotas seguidas y hacer que el proyecto tiemble. 16 puntos. El descenso no preocupa. Europa tampoco llama. Tierra de nadie. El primer paso para asentar un proyecto que está dando sus primeros pasos.En estos meses sí ha quedado claro que, para bien o para mal, será el Sevilla de Matías Almeyda. Un entrenador que comete errores, como todos, aunque los suyos cuestan más puntos al tener una plantilla de calidad ínfima. Por ello, todo lo bueno que saquen los sevillistas de este curso será en gran parte gracias a su entrenador. Ni los vientos de cambio en la propiedad pueden distraer a los profesionales de lo verdaderamente importante. Estar ya en la primera mitad de la clasificación es de Puerta de Jerez. Dos clubes con distintos objetivos. Han comenzado como se esperaba e incluso mejor. Se avecina un derbi. Fechas que pueden cambiarlo todo.